¿En qué se diferencia el teletrabajo del smart working?

La forma de trabajar ha ido cambiando, ahora las personas pueden hacerlo desde sus casas en horarios flexibles y con condiciones más cómodas. El empleado puede así organizar sus tiempo en base a sus responsabilidades laborales y diarias, en sus hogares.

Teletrabajo y smartworking se imponen

La tecnología no solo nos ha permitido nueva formas de comunicarnos, de informar, y de divertirnos. También ha dado herramientas para simplificar el trabajo, rompiendo las barreras habituales del tiempo en la oficina, y ofreciendo horarios flexibles ya que ahora en muchos de los casos se puede trabajar desde casa.

En los últimos años han surgido dos nuevos términos, el Teletrabajo y el Smart Working. Aunque son muy parecidos y pueden tender a confundirse, cada uno tiene características particulares que lo diferencia el uno del otro. Pero antes de conocerlas, es importante definir a que se refiere cada una.

El Teletrabajo o mejor conocido como trabajo a distancia, es aquel que se realiza fuera de la oficina, es decir, alejado de las oficinas centrales. Utiliza las Tecnologías de la Información y la Comunicación (TIC) para vender productos y servicios al mundo.

Mientras que el Smart Working, es asociado a la posibilidad de trabajar en casa pero va más allá de eso ya que se le saca provecho al auge de las Tecnologías de la Información y la Comunicación (TIC). La clave en todo esto es que puedes realizar tareas en cualquier lugar,con total autonomía y de manera muy flexible.

Elementos

El Smart Working, tiene como características principales:

• Se trabaja de forma remota, sin importar el lugar, es decir, desde casa, hotel, parque entre otros.
• Conocer ampliamente los objetivos trazados para ser alcanzados.
• Se debe tener en cuenta el tiempo con el que se dispone para lograrlos.
• Contar con la tecnología necesaria para estar conectados, en especial una buena conexión a internet.

Por su parte el Teletrabajo se enfoca en:

• Realizar las labores fuera del sitio habitual de trabajo, es decir, que el empleado no está físicamente vinculado o relacionado al centro de trabajo en su totalidad del tiempo.
• Va fuertemente relacionado al uso de TICs ya que el proceso productivo se realiza mediante el uso y soporte de dichas tecnologías de información.
• Modifica la organización de los métodos tradicionales de trabajo, donde el empleado se ve obligado a adoptar modelos negocios basados en SOHO (Small Office, Home Office- Pequeña oficina, oficina en casa).

Expertos señalan que «una idea evolucionada del teletrabajo, en el que se contempla realizar las tareas desde el propio domicilio del profesional. Sin embargo este concepto a día de hoy se estaba quedando obsoleto, ya que es muy habitual ver a personas trabajando desde aeropuertos, aviones, cafeterías, hoteles y cualquier lugar que ofrezca una buena conexión a Internet. Por ello, era necesaria una evolución, y así es como surge el Smart Working».

Diferencias conceptuales claras

Entre las diferencias entre un método y otro es, «la diferencia principal entre este concepto y el teletrabajo es que en el primero se disipa cualquier tipo de barrera para realizar las gestiones profesionales. El profesional puede realizar sus tareas allí donde esté: desde un hotel, en la biblioteca, en una cafetería o incluso, en un parque», resaltan los expertos.

Dejan en claro que lo que se necesita es tener el material necesario para realizar las tareas y estar en constante comunicación con la empresa. «Este tipo de metodología también permite aprovechar incluso aquellos espacios de tiempo aparentemente muertos. Por ejemplo, el tiempo de espera en un aeropuerto puede ser una ocasión para hacer llamadas pendientes», suman.

Datos del Instituto Nacional de Estadística (INE), señalan que tan sólo el 27% de las empresas apuestan por el Teletrabajo. Y en cuanto al Smart Working apenas comienza a ser una realidad en algunas empresas con un fuerte componente tecnológico.

Entre las similitudes aparece que no sólo el trabajador gana con el cambio al disponer de mayor libertad para adaptar la jornada laboral a sus necesidades; también lo hace la empresa al poder reducir sus costos. Aunado a eso permite ahorrar tiempo y dinero, al evitar los gastos de desplazamiento.

En el Teletrabajo y el Smart Working lo importante es cumplir con los objetivos. «Todavía pesa mucho la cultura del presentismo y la cultura del control a la hora de gestionar un equipo y gestionar el trabajo. Y esto es aún un lastre para la implantación del en algunos países», asegura David Díaz, socio responsable de Laboral de Baker&McKenzie.

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