¿Es una buena cualidad «trabajar bajo presión»?

Por Claudia Rengifo

¿Has escuchado alguna vez que se necesita personal que trabaje «bajo presión» en una oferta laboral? ¿Esta premisa es del todo correcta o estamos cayendo en los abusos? En este post te daré mi opinión y pondré en contraste toda esta situación.

Las modas en los recursos humanos

Así como todo en la vida, en los recursos humanos también se ponen de moda ciertos términos que ya llegan a convertirse casi en muletillas. Por ejemplo: los anglicismos en las ofertas de trabajo, trabajar en equipo y el famoso bajo presión. Esto de un tiempo para acá se ha convertido en la panacea de las cualidades para encontrar empleo. Parece que todos los reclutadores buscan ese tipo de perfil.

Lo de trabajar bajo presión en los últimos tiempos ha adquirido una connotación negativa por parte de los aspirantes. Esto es un síntoma de que algo no funciona bien y que bajo esta descripción se pueda incurrir en abusos hacia los aspirantes, falta de planificación empresarial o gerencial.

¿Quién es un profesional que trabaje bajo presión?

Al describir este término estariamos hablando de una persona que ante ambientes de tensión toma de decisiones importantes, sepa comportarse y afrontarlo poniendo a prueba todas sus capacidades. Implica control sobre sí mismo para no caer en peleas innecesarias con su equipo o mala ejecución con consecuencias fatales a futuro.

Este término también denota gran capacidad de resiliencia, importante en cargos de liderazgo o puestos de alto desempeño.

Mira este post: ¿por qué es importante la resiliencia en lo profesional?

La exigencia de trabajar bajo presión revela que dentro del cargo existe mucha responsabilidad. Así que usarlo para ofertas gerenciales y de liderazgo en una empresa no es incorrecto.  Está totalmente admitido ya que este tipo de empleo implica una fuerte competitividad, experiencia y dosis de estrés sobre el promedio.

También el término se puede utilizar para personas que trabajan a objetivos, como comerciales, que cada cierto tiempo deben rendir cuentas de su desempeño.

¿Pero está bien usar el «bajo presión»?

Es incorrecto usar «trabajar bajo presión» para ofertas de empleos comunes. Esta descripción se presta para abusos y para trascender las responsabilidades laborales relacionadas con el cargo. En estos tiempos de crisis laboral algunos empleadores buscan que una persona cargue con funciones para las que se tendría que requerir uno o dos trabajadores extras.

todo bien estres

Por ejemplo si a mi me contratan para diseñar no deberían luego exigirme dirigir redes sociales, configurar la página web de la empresa, crear una agenda de clientes, vender…¿no es cierto?

Pero lo de trabajar bajo presión sí es un requisito válido para algunas profesiones, en donde las soluciones rápidas son el pan de cada día así como el estrés.

Cuidado con el síndrome de burnout en tu vida laboral.

Algunas profesiones que podrían exigir trabajo a presión son:

  1. -Cargos gerenciales o directivos (CEO).
  2. -Producción audiovisual o dirección.
  3. -Logistica de eventos.
  4. -Vendedores.
  5. -Profesionales de la salud (médicos, enfermeras, anestesiólogos, entre otros).
  6. -Ingenieros de alto nivel.

Si se te ocurre otro cargo al que podría aplicar esta denominación escribelo en los comentarios.

¿Qué puede causar la presión innecesaria en los trabajadores?

La mayoría de los empleos exige cierta dosis de presión en especial si tratas directamente con clientes o con procesos que necesitan rapidez. Esto es normal incluso fuera de la vida laboral, el estrés es parte de nuestro día a día. Cuando se exceden los límites en trabajos comunes trae consecuencias tanto para el trabajador como para la empresa.

  • Consecuencias para la empresa: Demasiada movilidad laboral, bajo desempeño del personal, resultados mediocres, aumento de los permisos, posibles denuncias por abusos, gastos mayores en reclutamiento. A mediano plazo es común que se cree un ambiente tóxico.
  • Consecuencias para el trabajador: Temor e inseguridad ante cualquier decisión simple, desanimo para desempeñar sus funciones, baja creatividad e iniciativa, dolores de cabeza diarios e irritabilidad.

¿Tú que opinas de este tema? No dudes en dejarnoslo saber en los comentarios, agradeceríamos mucho tu opinión. Si quieres colaborar con nosotros o contratar nuestros servicios escríbenos a mente.profesional.blog@gmail.com

Post relacionados

Deja un comentario

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.

Artículos de crecimiento profesional y personal.